Convulsiones,
¿cuándo acudir al neurocirujano?
Las convulsiones son un fenómeno neurofisiológico que puede ser causado por varias afecciones médicas. En términos sencillos, una convulsión es una descarga eléctrica anormal en el cerebro. Las personas a menudo asocian las convulsiones con la epilepsia, pero este no es siempre el caso. Mientras que la epilepsia es una de las causas más comunes de convulsiones recurrentes, también pueden ser provocadas por otras afecciones como fiebre alta, trauma craneal, infecciones del sistema nervioso, entre otros.
Los síntomas pueden variar dependiendo del tipo y del área del cerebro afectada. Los signos comunes incluyen la pérdida momentánea de conciencia, sacudidas o movimientos espasmódicos, confusión temporal, pérdida de control de la vejiga o intestinos. Las convulsiones pueden ser clasificadas en dos categorías principales: convulsiones focales, que afectan solo una parte del cerebro, y convulsiones generalizadas, que afectan ambos lados del cerebro.
El manejo de las convulsiones, especialmente las recurrentes, generalmente se realiza primero por un neurólogo. Sin embargo, hay casos en los que es esencial consultar a un neurocirujano, por ejemplo:
1. Convulsiones que no responden a medicamentos convencionales antiepilépticos después de un tiempo adecuado y dosis suficiente. La cirugía de la epilepsia puede ser una opción en estos casos.
2. Lesiones cerebrales identificables como tumores, malformaciones arteriovenosas, quistes, entre otros.
3. Emergencias neurológicas que pueden requerir la intervención inmediata de un neurocirujano.
4. Cambios neurológicos nuevos o progresivos como cambios en la visión, el habla, la fuerza, la sensibilidad o si los síntomas existentes empeoran.
5. Trauma craneal reciente
Si experimentas convulsiones de manera regular o irregular, es crucial buscar la evaluación de un especialista neurocirujano. Recuerda, la detección temprana y el tratamiento apropiado pueden ser cruciales para prevenir futuras complicaciones y mejorar la calidad de vida.
